
1.-Fase aguda anemizante, caracterizada por fiebre, malestar, palidez, anorexia, decaimiento, debilidad, sed aumentada, postración, cefalea, astenia, sudoración, dolor abdominal, coluria, vómitos, e ictericia, dolor intenso a nivel cervical, lumbalgia, lesiones dérmicas máculo papulosas .
3.- Fase eruptiva o crónica se caracteriza por la presencia en cara, miembros superiores e inferiores de verrugas de diversas formas, habitualmente asintomáticas, que pueden curar en 4 a 6 meses o permanecer de por vida. La evolución se caracteriza por una fase de reblandecimiento y una etapa final de reabsorción. Las verrugas superficiales se esfacelan, sin dejar cicatriz, son frecuentes el sangrado de las verrugas, fiebre, dolores articulares, mialgias y prurito. El tratamiento de elección en la fase aguda anemizante es el cloramfenicol, combinado con cefalotina. Mientras que el tratamiento de elección en la fase eruptiva o crónica es la roxitromicina, la rifampicina o la ciprofloxacina. No existe hasta la fecha vacuna alguna, ni es útil la quimioprofilaxis con antibióticos.