Un estudio realizado por los Hospitales Universitarios de Ginebra (HUG) y la Universidad de Ginebra (UNIGE) ha revelado, a través de un análisis de las publicaciones en X relacionadas con la obesidad publicadas entre abril de 2019 y diciembre de 2022, que la mayoría de estos mensajes cortos transmiten sentimientos negativos sobre las personas con sobrepeso. Las posiciones adoptadas por políticos y celebridades influyentes desempeñan un papel importante en la formación de la opinión pública sobre esta cuestión.
El estudio pone de relieve la discriminación que sufren las personas con sobrepeso y el papel de las redes sociales en la propagación de estas críticas. Comprender las actitudes y percepciones públicas hacia la obesidad es esencial para el desarrollo de políticas sanitarias, estrategias de prevención y enfoques de tratamiento eficaces.
El estudio examino los sentimientos del público en general, personalidades políticas, celebridades y organizaciones importantes en relación con la obesidad mediante el análisis de 53.414 tuits publicados en inglés sobre este tema entre abril de 2019 y diciembre de 2022 en medio de la pandemia de COVID-19. El análisis de estos tuits reveló que eran principalmente negativos (69,36%) y en aumento, mientras que los neutrales (20,91%) y positivos (9,73%). Los tuits relacionados con la obesidad también se asociaron muy a menudo con el racismo, con opciones de vida menos juiciosas y con males sociales como el consumo de sustancias ilícitas y alcohol.
El estudio demuestra que las representaciones negativas de la obesidad por parte de políticos y celebridades influyentes contribuyen a generar sentimientos negativos entre el público en general y a perpetuar estereotipos y prejuicios hacia las personas obesas o con sobrepeso. Esta estigmatización puede tener repercusiones en la salud mental y el bienestar de estas personas y tener efectos adversos en la salud pública.
Los investigadores observaron que los picos de críticas estaban vinculados a eventos políticos y comentarios de celebridades en los EE. UU. y el Reino Unido. Por ejemplo, se transmitieron muchos mensajes negativos cuando celebridades con sobrepeso fueron hospitalizadas por COVID-19, cuando el presidente de los Estados Unidos anunció que quería perder peso y cuando el gobierno británico lanzó su campaña contra la obesidad.
El estudio señala que cuando personalidades destacadas publican comentarios u opiniones negativas sobre la obesidad, sus suscriptores tienen más probabilidades de participar en conversaciones similares, lo que perpetúa aún más la negatividad. Demuestra, por tanto, el papel de los influencers en la formación de la opinión pública sobre cuestiones de salud y subraya que las personalidades públicas deben ser conscientes de las posibles consecuencias de sus pronunciamientos en términos de salud pública.
Los resultados de este estudio han mejorado la comprensión del papel de las redes sociales en la configuración de los sentimientos, actitudes y comportamientos de salud del público en general sobre una variedad de temas, en este caso la obesidad.
También serán útiles para el desarrollo de políticas de salud pública eficaces, estrategias de prevención y enfoques de tratamiento que hoy en día deben tener en cuenta los desafíos únicos que plantean las redes sociales y las comunicaciones digitales en términos de salud pública.
El estudio se publica en el Journal of Medical Internet Research.
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