Investigadores de la Universidad de Texas en Arlington utilizaron técnicas no invasivas y métodos computacionales avanzados para medir las señales eléctricas y magnéticas generadas por las células neuronales en el cerebro humano con el fin de identificar las redes funcionales que son responsables de la generación de convulsiones en niños que padecen epilepsia. Este nuevo método identifica esas redes funcionales con alta precisión.
Al identificar qué partes del cerebro están produciendo las convulsiones, se pueden resecar con cirugía cerebral o extirparlas con láser. La prueba que están desarrollando señala exactamente dónde está la red que esta desarrollando la epilepsia. Actualmente, no existe un examen clínico para identificar esta área del cerebro con alta precisión.
Las convulsiones afectan a estas personas durante toda su vida y tienen un impacto significativo en su desarrollo normal. El tratamiento exitoso de la epilepsia mediante cirugía o ablación con láser en una etapa temprana de la vida proporcionaría un mejor resultado, ya que los cerebros poseen una gran plasticidad neural y pueden recuperarse después de la cirugía mejor que los cerebros de los adultos. Esto ayudaría a esos niños y futuros adultos a vivir sin convulsiones y a tener menos comorbilidades a causa de la epilepsia.
Esta investigación es un ejemplo característico de cómo la bioingeniería puede tener un impacto directo en la vida de los pacientes.
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