El Insomnio Clasificación y Consecuencias

La dificultad para alcanzar el sueño tiene 4 formas diferenciadas: puede haber problemas para dormir al acostarse, es decir, insomnio inicial, que es el más común; después se encuentra el insomnio intermedio, que se da cuando la persona se despierta con frecuencia durante la noche; también puede aparecer el insomnio terminal, que ocurre cuando el despertar tiene lugar por la mañana, tiempo antes de lo esperado y deseado por la persona afectada; y finalmente se encuentra la alteración del patrón del sueño, que tiene lugar cuando la persona se acuesta y duerme un número adecuado de horas pero se despierta cansado, como si no hubiera descansado nada.En función de su duración, el insomnio puede ser transitorio o agudo, con una duración inferior a un mes; sub-agudo, que se puede prolongar más de cuatro semanas pero no dura más allá de 3 a 6 meses; y por último el insomnio crónico, que puede llegar a durar más de 6 meses. Las personas que se ven afectadas por el insomnio pueden acabar padeciendo dificultades de concentración, depresión, cansancio, somnolencia, irritabilidad e incluso pueden sufrir y provocar accidentes de tráfico. Además sus relaciones laborales y personales se ven afectadas negativamente y su salud se puede ver mermada. Según la seriedad del insomnio puede ser leve, por el cual el individuo afectado sufre un pequeño deterioro en su calidad de vida; cuando es moderado comienzan a aparecer síntomas como irritabilidad,fatiga y ansiedad, es aquí cuando el insomnio comienza a repercutir de forma más acusada en los afectados. En el estadio más fuerte del insomnio, de corte grave, la calidad de vida de los individuos que sufren problemas de sueño se reduce en mayor medida. Dormir bien no es solo fundamental para el cuerpo, sino también para el alma. Cuando dormimos dejamos a un lado las preocupaciones que nos afectan.

Descubren Peptidos que pueden Eliminar el Cancer

Se han localizado dos péptidos o proteínas en las secreciones de dos tipos de rana que se pueden usar para controlar y establecer la forma de regular la angiogénesis. Según el autor principal del descubrimiento, Chris Shaw, profesor de la Facultad de Farmacia de la Universidad de Queen, "las proteínas encontradas tienen la habilidad de simular o inhibir el crecimiento de los vasos sanguíneos. Apagando la Angiogenesis e inhabilitando el crecimiento de los vasos sanguíneos, la proteína tiene el potencial suficiente para acabar con el tumor". La explicación del hallazgo está en que frenando los vasos sanguíneos desde el principio, el tumor se vuelve menos fuerte para propagarse y más vulnerable a ser eliminado. La proteína de las ranas de la especie Waxy Monkey tiene la afcultad de transformar el cáncer desde enfermedad terminal a condición crónica. Las proteínas de la piel del mismo animal de la especie Giant Firebelled Toad, consigue el efecto contrario, encender la angiogénesis y estimular el crecimiento de los vasos sanguíneos para tratar enfermedades y condiciones que requieren una reparación rápida como los trasplantes de órganos, la diabetes ulcerosa y el daño causado por los accidentes cerebrovasculares. Este descubrimiento aumenta la esperanza de desarrollar nuevos tratamientos ante enfermedades que afectan a más de un billón de personas en el mundo.

Factores de Riesgo para el desarrollo del Autismo

Un Estudio presentado en la Conferencia Anual del IMFAR (International Meeting for Autism Research. Descarto que la cesárea tuviese relación con el autismo, pero si la Hipertensión, la Diabetes y la Obesidad durante el embarazo. Para realizar el estudio, los investigadores se basaron en los datos de 1.000 niños, que están dentro del programa CHARGE (Childhood Autism Risks from Genetics and Environment). Este incluye 462 niños con TEA, 136 con otros desordenes del desarrollo y 256 niños con un desarrollo normal. Todo ellos con una edad de 2 a 5 años. En este estudio también se consideró la incidencia de la fiebre en el segundo trimestre del embarazo, ya que estudios preliminares, sí hablan de una posible conexión entre infecciones virales durante el embarazo y el autismo. Y que estaría relacionado, no con el virus en sí, sino con las repuesta inmunológica de la madre. El estudio encontró una mayor probabilidad de tener niños con Autismo de madres que presentaban hipertensión crónica, obesidad o que habían tenido diabetes gestacional. En resumen, los factores de riesgo asociados serían pues: Edad avanzada de la madre, Preeclampsia, diabetes, obesidad, hipertensión, tabaquismo en la madre y brotes febriles durante el embarazo.